sábado, 27 de agosto de 2011

Señoras y Sueños

Hoy ha sido un día difícil, de contrastes.
·Por la mañana, mientras paseaba con mi novio, una señora nos adelantó  y acto seguido volvió la cabeza hacia nosotros mostrándonos una amplia sonrisa. Yo sonreí también, pero sin saber el motivo de por qué lo hacía ella. Entonces, se dirigió a nosotros y dijo: ''¡Que chica más cariñosa!''...y todo porque en el momento en el que pasó por nuestro lado, yo estaba abrazada a mi pareja dándole un beso y diciéndole algo así como ''¿Cuándo vemos Watchmen?'' Mientras continuábamos con el paseo, mi cabeza comenzó a analizar, desde mi punto de vista humildísimo (siempre me tachan de serlo demasiado), lo que para mi fue un acto de lo más natural:
-¿Por qué llamé la atención de la señora? ¿Por qué le resulté especialmente cariñosa ante lo que fue, no por mal, una acción tan poco relevante o 'romántica'? No creo que la mujer se dedique a dar vueltas buscando parejas a las que escuchar y piropear/juzgar...-
Y entonces fue cuando llegado este punto, mi ego comenzó a elevarse poco a poco, concluyendo cosas como...¡caray! que maja soy, o...igual si soy especial con estas cosas del amor, e incluso...¡¡debo ser una novia estupenda!! (ERROR)
·Por la noche, durante una conversación con mi (si, otra vez) novio en la que él trataba de convencerme de que escriba mi siempre soñado -libro de relatos cortos- surgió inevitablemente el tema que siempre he temido, ese que dice ''¿Qué quieres hacer? Pues hazlo, lucha por ello''. Ante mi terquedad de negarme sistemáticamente a intentar hacer aquello que va a ser juzgado por los demás, mi querido y amado A*... me dio una lección de Humildad con sus palabras. Si, de humildad. Porque me hizo ver que las cosas no las hago porque ni siquiera lo intento, porque me es más fácil decir que lo que va a salir va a ser una mierda y, así, directamente ahorrarme el esfuerzo.
Y entonces mi cabeza comenzó otra vez a analizar la situación, sus palabras y...igual no soy tan humilde como la mayoría cree, como incluso yo llegué a creer (ahí ya se me veía el plumero). Porque quizás el problema de que siempre me rinda sin luchar por lo que quiero, por mis sueños, es que siempre me consideré demasiado buena como para poder ser juzgada, como para permitir a los demás dar su opinión sobre algo creado por mi.
Ego hundiéndose...hundiéndose...mi ego a la mierda, vale, pero ahora sé que lucharé por mis sueños, y con la humildad justa y necesaria.
Hoy ha sido un día difícil, un día de contrastes :)

Sra. Mono Rubio




1 comentario:

  1. Siendo sinceros, entiendo perfectamente las palabras de la Sra. Mono Rubio, siempre me ha dado la sensación de ser, quizás algo más conformista al resto de los monos... Me enorgullezco de sus palabras y sólamente espero que no sea un arrebato de inconformismo existencial y sí el comienzo de una vida de esfuerzos y recompensas, aunque ya veréis que la recompensa no aparece como grandes hitos en la mayoría de las ocasiones, sino en pequeños detalles que si sabes apreciar, harán de nuestra vida, lo que es, una vida. Un abrazo del

    Sr. Mono Naranja

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