sábado, 27 de agosto de 2011

Racista estetico, snob intelectual...

Me presentare sin timidez como un racista estético, un snob intelectual, un extremista del pensamiento y un intransigente de la juventud y no, esto no es una declaración de intenciones, mucho menos un manifiesto, sino que son los pilares de una vida que teclea ahora estas líneas. Se me olvida mi declaración es enrevesada, simbolista y un  tanto preciosista pero seguro que no tiene ningún ánimo de que sea comprendida.

-Lo reconozco, enloquezco con lo bello, me embriago de él hasta que mis sentidos se embrutecen o hasta que el dolor haga acto de presencia, con ese aroma depresivo y aspecto anti vital con el que siempre se muestra (desgraciado él pues solo se conoce a el mismo). Desecho sin miramientos aquello que no obedece a mis estándares estéticos que mancillan mi sentir con su crueldad. Adoro lo estético, aquello que despierte en mi ese amor insano por el que suspiro y que después de su golpe ya solo recuerdo puedo tener pues es el presente mi mas fugitivo amigo.

-En cada punta de los dedos más de un millón de conocimientos, atesorados sin diligencia ni orden, un tanto bohemio es el armario de mi cabeza. Me resigno al conocimiento de un mundo que no me diseño para que lo comprenda, al menos me ha dado poetas, músicos, eruditos que con su ánimo plasmado en las curvas de cada letra me hacen parecer ignorante e ignorado, amarga prueba de humildad.

-Sí, el pensamiento es el arma del hombre, ese instrumento orgánico que nos capacita para crear lo maravilloso para arrancarlo a la fuerza  del cielo de la perfección y detesto a aquellos que olvidan su potencial en deseos vanos , esperanzas insignificantes y objetivos inútiles.

-La juventud, siempre serás mi aliada, me lo prometes cada noche y cada noche te noto un poco más distante, pero por ti seguiré luchando, para que lo viejo se queme y olvide y el presente tome el gobierno legitimo de la realidad que hoy se reparte entre el bastardo futuro, ilusionista tramposo y el pasado, dulce impostor.

Mis intenciones descansan ahora, pero seguro que alumbran en esos pensamientos eléctricos del lector alguna luz temperamental que ayude a empezar ese proyecto guardado en los arcones del pasado, que cambie de una vez lo de invertir demasiado tiempo en los sueños y poco en los actos que lo alcanzarían.

 Cambia.

Sr. Mono Azul.

1 comentario:

  1. Me siento en parte halagado por haber comenzado una serie de reflexiones encaminadas a un mismo punto, el de el sentido de las vidas, pero señor Mono Azul, me he de arrodillar ante tus palabras, porque, sin duda, sacan los colores a las mías. Me encanta la fuerza con que escribes. Un abrazo

    Sr. Mono Naranja

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