sábado, 15 de octubre de 2011

Observad:

Qué bella es la vida, chicos. ¿No os lo parece? A mí me parece bellísima. Todo, los paisajes, las personas, los pajarillos que levantan vuelo, las estrellas. Y me pregunto, porqué tengo tanta suerte de poder vivir. Estoy aquí fumandome un cigarrillo, tomando un café y pensando en lo que me deparará esta vida. Lo único que sé es que lo tomaré como la oportunidad que he tenido de venir aquí, de nacer, de vivir y estaré profundamente agradecido por ello el día en que me vaya. Insisto es bellísimo. Me miro al espejo, sonrío y pienso: "Qué cabronazo, este tío está vivo, y lo que le hace sonreír es que es consciente de ello". Y me gusta lo que soy, soy cada abrazo que he dado, cada beso, cada sonrisa, soy incluso aquellos momentos, probablemente también bellos, que ya ni siquiera recuerdo. Soy incluso el que escribe ahora estas palabras escuchando a Louis Armstrong, el que volverá a sonreír mañana, el que volverá a besar y a amar, bueno amar, amar ya amo. Os amo a todos y a cada uno de vosotros, a mi manera, más o menos, pero os amo, sí tú también, esta desconocida que lee ahora mis palabras, sonríe y sin llegar a conocerte nunca, también te amaré.

Es todo tan sublime, los buenos momentos y también los malos. ¿Qué hay más bello que una muchacha llorando? No soy cruel ni mucho menos, sólamente intento rescatar la belleza de cada sitio en que la haya, por escondida que parezca... Incluso en lo más banal se encuentra. Buscadla, sabiendo que la hay, siendo conscientes de ello, la encontraréis. Os sonrío ahora a todos y cada uno de vosotros, desde detrás del humo de mi cigarro. Amad, sentid, llorad y sonreid, porque todo eso será lo que sois. Un abrazo para todos del Sr. Mono Naranja

1 comentario:

  1. Para mi, tu mejor entrada mi querido Naranja.
    Un abrazo enorme para ti también de la señorita Rubio :)

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